Salimos desde Cuacos de Yuste y nos dirigimos en primer lugar hasta Madrigal para allí empezar la ruta por los caminos. Tuvimos una suerte estupenda porque el día fue soleado con una pequeña brisa y aunque tuvimos una tormenta al llegar a Valverde y luego al finalizar en Cuacos, no se pudo pedir más, fué realmente un buen día.
Llegamos a Madrigal de la Vera al puente romano. Es de un solo arco, de piedra y andar por el te traslada a otro tiempo. Las vistas hacia la Cresta de Gredos en Madrigal son claramente imponentes según se va por la carretera y cuando se llega al puente pues no hay más que suspirar y mover la cabeza confirmando que realmente estamos en una comarca de una gran belleza.
Comenzamos la ruta cruzando el pueblo por la plaza mayor pero en un momento dado no pudimos continuar, no estaba desbrozada y con el coche era imposible. Tuvimos que dar marcha a tras y volver a mitad del camino para tomar otro que finalmente nos sacó a la carretera. Durante un rato de carretera, salimos por un camino a la izquierda donde pasamos por un camino de huertas. Finalmente volvimos a la carretera para salir a la altura de la garganta de Minchones. Pequeña garganta para remojarse los pies.
Después de la garganta otra vez en el GR-111 fuimos a parar a una zona donde otra vez se cortaba el camino.justo al lado de la finca que tiene el Ministro de Defensa. Impresionantes vistas desde una gran llanura con Gredos al fondo, precioso sitio tiene el Sr.Ministro.
Vuelta a tras y llegada a Villanueva. He hicimos una pequeña parada en la plaza de Villanueva para tomar un refrigerio. Esa plaza que se pone de bote en bote durante la fiesta del Peropalo. La fuente y el reloj están de escenario junto al Peropalo en mi memoria.
Continuamos una vez tomamos el aperitivo hasta Valverde. Otra vez en el camino hubo un tramo que anduvimos a pie y nuestro copiloto nos recogió más adelante. El paseo fue muy agradable y el paisaje cambió. Llegamos a Valverde donde comimos en una terraza. Rato de parada con tormenta final que no nos impidió continuar para Viandar y Talaveruela para llegar más tarde a la garganta de Cuartos en Losar.
Alli ya había un par de personas ya tomaban el sol, el día ciertamente estaba de lo más apropiado y encaramados a una piedra disfrutaban placidamente de los rayos del sol. Aquí el GR-111 va junto a la garganta pero no se puede seguir en vehículo y al final optamos por ir por otro camino, igualmente bonito. Llegamos al pueblo y lo atravesamos pasando cerca de la residencia de mayores de Losar, pero otra vez, llegó un momento en el que el camino no se puede seguir, así que nuevamente vuelta a la carretera y salida más adelante. Losar tiene unas vistas de la sierra muy bonitas. Si bien el camino no tiene sombras la vista es preciosa. Llegamos a la ermita de la Virgen del Sopetrán en Jarandilla.
En Jarandilla cruzamos hasta llegar por el puente Parral pero en vez de continuar por la ruta del Emperador, continuamos por el camino de la izquierda. Fue un bonito final para un día de caminos. Cruzamos una zona de bosques de robles espectaculares en sombra hasta la zona de Valfrio en Cuacos.
Desde luego la conclusión que sacamos es que la Vera bien merece recorrerla despacio. Desde cada pueblo hay varias rutas. Si están desbrozadas y bien señalizadas es un auténtico deleite poder estar en la naturaleza con estos parajes nuestros.
¿qué caminos de la Vera conoces?
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